*TRABAJO FINAL*

UNIDAD I: Antecedentes de la Situación Actual en México
*El periodo de la Institucionalización
*La fase de Desarrollo Estabilizador
*El Desarrollo Compartido
UNIDAD II: Panorama Económico del México actual
*La economía Nacional
*Corporativismo
*Renegociación de la Deuda 1989
*Tratado de Libre Comercio
UNIDAD III: Situación Social
* Política Social
*Programas Sociales
*Los rezagos Sociales
UNIDAD IV: Coyuntura Política Actual del País
*Las reformas de la Legislación
* Proceso Electoral de 1917 y 2000

miércoles, 23 de noviembre de 2011

La economía Nacional- Estado de Bienestar y Estatismo


Un estado de bienestar no sólo tiene la responsabilidad normal de un gobierno que cuida los derechos de los ciudadanos, especialmente sus libertades (un estado de derecho) —también se adjudica la responsabilidad de brindarle servicios adicionales como seguridad social, vivienda, educación y otros, como pensiones, energía, diversión pública, transporte, guarderías infantiles y otros más, con la idea de que eso logra elevar la calidad de vida de las personas.
La consecuencia lógica de esa ampliación de las responsabilidades gubernamentales y del número de burócratas, es la necesidad de mayores recursos propiedad del gobierno —cosa que requiere necesariamente de impuestos más altos a los que se pagarían dentro de un sistema que no fuera de bienestar.
Los ciudadanos pagan altos impuestos, los que sirven para pagar a la burocracia que después da el servicio al ciudadano, como atención médica o educación.
Un estado de bienestar, por esa característica, es un tipo de gobierno de poder concentrado y muy grande. Por eso muy opuesto a las creencias liberales que sostienen la idea de un gobierno de poderes más limitados y menos costosos.
Los gobiernos de bienestar poseen más poder que los que no lo son por los mayores impuestos que reciben y por ser los principales o únicos oferentes de servicios que piensan son primordiales —son esos gobiernos los responsables del bienestar de sus ciudadanos.
El estado benefactor también llamado Estado del Bienestar; asegura la protección social, entendida esta mediante derechos tales como: la sanidad, la vivienda, la educación, los servicios sociales, las pensiones de jubilación o la protección del empleo o del empleado.
    • Estado Benefactor
    • La entrada del radicalismo al gobierno
    • No significo-cambios-en organización del sistema educativo
    • Propuestas-criticar- aspectos- elitista y restrictivos- modelo
    • reclamar- mayor participación
    • Nuevos actores- encargados- cuestionar la legitimidad-estado
    • Surge – KEYNESIANISMO- intervención activa del estado en la economía. Rasgos
Económico: abandono la idea- capitalismo- concepciones keynesianas Político : expresar- alianza- sectores favorecidos- procesos industrialización crecimiento del mercado interno Social: estado- se transformo- garante- derechos sociales influenciando- redistribución- recursos – sectores trabajadores Educación : incorporada- como estrategia- capacitar- mano de obra- satisfaciendo-demandas de industria Formación del ciudadano: reemplazo- formación para el trabajo- para convertirse- formación de recursos humanos Dejo de ser un gasto social- para transformarse en inversión
CRISIS DEL ESTADO BENEFACTOR
En los años 70- comenzó a decaer internacionalmente
En nuestro país- la declinación del estado fue en el año 1975
En este año la inflación alcanzo niveles alarmantes
Los gobiernos que administraron la crisis fueron:
Peronista (1973-1976)
Militar (1976-1983)
Radical (1983-1989)
La educación desempeño diferentes funciones en estos gobiernos:
Educación para la liberación (1973-1974)
Fue concebida como un mecanismo para la redistribución de los bienes económicos y las oportunidades sociales
Educar para el orden (1974-1983)
Se aparto de los golpes de estado sucedidos en 1930 en nuestro país.
Educar para la democracia Se absolutizo el papel del estado en la transmisión democrática en torno al cambio de normas, reglamentos y practicas las cuales permitieron desmontar el sistema autoritario.
ESTATISMO EN MEXICO
En México, el tema de la radio comunitaria es viejo y nuevo a la vez; viejo porque las primeras emisoras de ese tipo –Radio Huayacocotla y Radio Teocelo– datan de hace 40 años, pero nuevo porque el interés de expresarse a través de la radio por grupos de la sociedad civil adquirió fuerza en el segundo lustro de los años 90 y el primero del siglo XXI, como lo demuestra la corta biografía de casi todas las estaciones comunitarias que obtuvieron su permiso legal para operar en 2004 y 2005: de las 11 que lograron esa autorización diez fueron creadas en los últimos 12 años.
Cultura estatista
¿Por qué, a diferencia de otros países, México no ha transitado con mayor fuerza por el camino de la radio comunitaria? ¿Por qué expresiones como la radio minera de Bolivia o las radios “libres” en Europa no tuvieron equivalente en México donde, al igual que en otros lugares del mundo, las frecuencias radiofónicas son controladas por un poderoso gremio empresarial y por el Estado? Parece claro que la razón fundamental está en las características que asumió la sociedad mexicana durante el siglo XX: debilidad de la sociedad civil combinada con la preeminencia del Estado en los campos de la política y la cultura, donde jugó un doble papel a la vez corporativo y promotor. El Estado cooptó movimientos sociales y controló gremios a través de una compleja política corporativa; al mismo tiempo se estableció como “promotor de la cultura” y actuó como “protector” de los grupos indígenas. Se desarrolló así una cultura política de tipo “paternalista” que otorgaba al Estado un díasderadio papel fundamental en la promoción de los intereses de diversos grupos sociales: sindicatos, organizaciones campesinas, sectores medios de la población. Una cultura política que se consolidó “arriba” y “abajo”. “Arriba”, la burocracia gobernante se acostumbró a actuar como receptora de demandas sociales que podía satisfacer o no de acuerdo a sus propios intereses disfrazados de “intereses de la nación”; “abajo”, grupos sociales se acostumbraron a “pedir” y negociar con los gobernantes.
En ese contexto, una organización tan poderosa como la CTM nunca se planteó, por ejemplo, constituir una “radio obrera”, lo mismo que cualquiera de los poderosos gremios que la integran: mineros, electricistas, petroleros, etcétera. Y lo mismo pasó con otros sectores y organizaciones que veían al Estado como la institución a través de la cual, mediante acuerdo y colaboración, podían hacer progresar sus intereses. La organización social autónoma , independiente del Estado, ha sido en México un proceso largo y tortuoso; quienes intentaron transitar ese camino fueron acusados de “disfuncionales”, “radicales” y hasta enemigos del “Estado de derecho”.

1 comentario: